
Esto parece un poco lioso, pero si nos ponemos a pensar en nuestras elecciones, nos daríamos cuenta de que las cosas que quizás hemos perdido por no haber sabido escoger correctamente, o por habernos dejado llevar por nuestros impulsos, no son tan importantes como las que ganamos en una buena elección.
He conocido a personas increíbles a lo largo de mi corta vida, pero sin duda me quedo con las que yo misma supe elegir. Con esas personas que han estado siempre en mi vida, apoyándome en todo y comprendiéndome cuando lo necesitaba. Y con esas personas que son más recientes y que han llegado como un soplo de aire fresco, que me han aportado cosas maravillosas y que aprendemos juntas de la vida.
En especial quiero destacar a cinco personajillas que en este último año han llenado mi vida, M.J. Mimir, Carmen, Eli y Soñaa. Estas personas se han ido adheriendo a mi corazón poco a poco. Algunas ya llevan tiempo conmigo, otras son relativamente nuevas, pero todas ellas me eligieron y las elegí.
A veces pienso qué habría pasado si no hubiese ido al colegio del pueblo de MJ, si la habría conocido o no, si hubiésemos coincidido aquí...
Si no hubiese venido este año a la residencia y no hubiera conocido a Mimir, o en el caso de estar en la resi, haber tenido habitaciones más lejanas. En ese supuesto, no sé si habríamos coincidido y llegado a intimar como ahora...
Con Carmen, si no hubiera elegido ir al instituto de su pueblo no la habría conocido jamás, de eso estoy segura, y me alegra haberme quedado allí...
A Eli y a Soñaa las conocí este curso en la universidad, han sido lo más grande, y ambas me han aportado muchísimas cosas y siempre han estado ahí, al igual que las demás.
Sólo tengo para ellas palabras de agradecimiento. ¡¡Os quiero!!
Cuando vas pensando las cosas, y recuerdas lo que querías ser de mayor cuando solo tenías 8 años, te das cuenta de las vueltas que da la vida, de que no puedes planear tu vida futura ni siquiera la inmediata. De que el pasado sirve para aprender de tus errores y recordar lo bonito que ya pasó, que no puedes quedarte habitando el olvido.
Este año me he dado cuenta de que, nunca he sabido lo que he querido, he llegado a donde estoy por inercia, y con suerte he elegido la carrera que más me completa.
Las elecciones son nuestras, la mayoría de las veces individuales, y sabemos que implican una serie de consecuencias que, a su vez, escogemos enfrentarlas o no. Toda decisión es correcta si la elegimos de corazón, y con el tiempo aprendemos a elegir lo mejor para nosotros, porque es lo que llevamos haciendo desde pequeños, escoger.
En general, estoy orgullosa de mis decisiones, las hay buenas, malas y peores, pero me quedo con las mejores.Es increíble el poder de una decisión. Puede hacerte la persona más miserable o la más afortunada del planeta. En un segundo puedes buscarte problemas o encontrar la solución a uno ya existente. En un segundo puedes arruinarte la vida. En un segundo... en un escaso segundo en el que pronuncias un sí o un no. La vida está repleta de decisiones y oportunidades que hay que saber aprovechar o rechazar, según se mire.
Un segundo es la duración de 9 192 631 770 oscilaciones de la radiación emitida en la transición entre los dos niveles hiperfinos del estado fundamental del isótopo 133 del átomo de cesio (133Cs), a una temperatura de 0 K.[1
ResponderEliminarEso, que no es mucho, es suficiente para que cualquira de esas oscilaciones cambie, para siempre, la dirección del viento que marca la veleta de nuestra vida.
Me encanta tu blog Rebe :)