Estoy frustradísima. Me cabrea, ya no el no poder leer el pensamiento, sino no saber analizar el comportamiento de una persona o encontrar un patrón universal para catalogarlo y conocer desde un principio de qué manera es. Me ahorraría muchas horas en blanco y momentos grises. De hecho, debería centrar toda mi energía en desarrollar esa habilidad, formándome día a día. De ese modo, descartaría a las personas tóxicas y conocería a las agradables o menos imbéciles. Ahorraría tiempo y mejoraría mi ánimo. Además, fomentaría también la maravillosa habilidad de mandar a la grandísima mierda a las estúpidas.
Imagen portada

domingo, 24 de agosto de 2014
domingo, 17 de agosto de 2014
Ya no ilumina a ningún
otro Sol, ni tirita cuando otros se reflejan en ella. Ahora los días se vuelven
insoportables o agradables si le honra con su presencia; cuando sus rayos
caprichosos se posan sobre su piel, y le calma su calidez. Un efecto pasajero,
pues cuando las nubes lo cubren y luce distante, oscurece las estrellas y éstas no pueden evitar precipitar su inquietud e impaciencia a su alrededor.
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